El pasado 20 de mayo, Día Mundial de las Abejas, resultó ser un gran día para los apicultores colombianos. La Cámara de Representantes aprobó en segundo debate, por unanimidad, el proyecto de ley para fomentar la apicultura. Un paso más para crear la Política Apícola que tanto necesitan nuestros apicultores y criadores de abejas. Ahora el turno es para el Senado de la República, en donde deberá ser votado en tercer y cuarto debate para convertirse en Ley de la Nación.
¿Por qué es tan importante este proyecto de ley y su aprobación en la Cámara de Representantes?
La respuesta corta es que esta ley permitirá desarrollar la vocación exportadora de las mieles colombianas que son tan apetecidas y bien valoradas a nivel internacional por sus calidades y sabores. Hoy nuestros apicultores no exportan las mieles que producen y por eso perdemos una gran oportunidad en los mercados internacionales. Mientras tanto, otros países de la región como Argentina, Chile, México, también El Salvador, por nombrar algunos, aprovechan el crecimiento del mercado de la miel para mejorar los ingresos de sus apicultores y obtener divisas para el país. Para desarrollar la vocación exportadora de las mieles colombianas, este proyecto de ley recoge la normatividad existente en el cuerpo de una Ley de la Nación para darle mayor peso e importancia a este sector. Principalmente, los temas a resaltar en el Proyecto de Ley son: Frente a la cría de abejas, fortalece y crea nuevos instrumentos para el manejo de las colmenas. Estos instrumentos abarcan tanto el manejo sanitario como el crecimiento del número de colmenas. Aunque el número de colmenas en Colombia ha crecido más de 50% en lo últimos diez años, se busca generar los incentivos e insumos técnicos para pasar de menos de 200.000 colmenas a la meta del millón de colmenas en un mediano plazo.
También buscar fortalecer la asociatividad apícola para disminuir los costos de producción de miel, polen y propóleo, especialmente para los pequeños apicultores. Por último, fortalece las medidas para combatir el mercado de mieles adulteradas y falsificadas, flagelo que afecta las ventas de las mieles naturales de los apicultores en el mercado interno.
En resumen, se trata de un proyecto de ley de naturaleza absolutamente económica para desarrollar y fomentar el agronegocio de la apicultura, mejorando las condiciones para la cría de abejas y la producción y comercialización de los productos derivados de las abejas.
La Ley Apícola es una tarea que estaba pendiente, pero que ya comienza a ver la luz y desde Abejas En Agricultura, celebramos su avance en el Congreso de la República.